
La formula expresada por San Agustín, " Ves la Trinidad si ves la Caridad", bien podría resolver la rigidez de las formulas trinitarias y sobretodo el gran número de imágenes y símbolos que han surgido, en la búsqueda por hacernos entender, el misterio de la Santísima Trinidad, pues en el amor encontramos, la mayor manifestación del ser en esencia de Dios Uno y Trino. Sin embargo vamos a intentar presentar algunas simbólicas que nos ayudan a ampliar el tema y conocer un poco mejor tan venerable Misterio.
Es importante tener claro que la imágenes no sustituyen a las palabras técnica y a los contenidos definidos por la Iglesia, las imágenes buscan concretar y materializar lo que representamos, además son de gran ayuda, pues nos permiten distinguir actitudes determinadas frente a la Trinidad.
Las simbólicas a lasque me voy a referir son: la económica, la de la piedad, la arquetípica, la antropológica, la familiar, la eclesial, la social, la material y la formal.
- La simbólica económica es el camino que nos permite penetrar más a fondo en la realidad de lo que es en verdad Dios, siendo Jesús el camino seguro para conocer al Padre, por medio de la acción del Espíritu. La Trinidad se hace para nosotros vida, que irrumpe nuestro diario acontecer, permitiéndonos pedagógicamente concretar nuestro existir en torno a las Tres personas.
- La simbólica de la piedad: La invocación Trinitaria siempre está presente en nuestra vida diaria, desde pequeños nos enseñan a invocar el nombre del Padre, del Hijo, del Espíritu Santo. Todos los actos litúrgicos y nuestras oraciones, los hacen presentes, especialmente desde el de nuestro bautismo, en la celebración de los demás sacramentos y de manera diaria en el sacrificio eucarístico.
La simbólica arquetípica: está simbólica nos da a conocer la totalidad, la presencia de las tres personas, atiende a las exigencias de la vida humana en busca de integración, de asociación y de totalidad. En donde se hace presente un cuarto elemento (la creación, la eucaristía, la Virgen), que nos da a conocer la riqueza interna que guardan entre los tres.
La simbólica antropológica: Nuestra fe Trina, nos hace recordar nuestro origen como personas humanas, hechas a imagen y semejanza de la Divinidad, haciéndonos participes del misterio que guarda la misma Trinidad, somos imagen del creador, por tanto como personas participamos del misterio, en donde sobresale la especial unidad de cada persona en el Dios Trino, gran misterio pues cada uno de nosotros con la particularidad de tenemos somos parte de esa unidad.
La simbólica familiar: En la Santísima Trinidad, encontramos el reflejo de toda familia, se destaca la presencia de cada persona, pero todas en conjunto forman una sola realidad, que es la familia Divina, la familia de Dios, cada persona con sus diferencias constituyen esa unidad.
La simbólica eclesial: está simbólica la encontramos claramente expresada en palabras de Tertuliano: “Donde están el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, allí también se encuentra la Iglesia, que es el cuerpo de los Tres”, es decir para que todos participemos de la misma unidad, expresada por nosotros en la fe, el culto y la organización, para que todos nos esforcemos por forjar y formar una sola comunidad.
La simbólica social: la historia de la humanidad siempre ha registrado en la constitución de la sociedad humana unos principios básicos que han permitido que se vaya entretejiendo una organización que garantice la vida humana, las relaciones comunitarias, la producción y el sustento de todos los hombres.
La simbólica material: hace referencia a reflexiones en forma de triada tomadas de la misma naturaleza, del mundo físico, en imágenes como el sol, el rayo y la luna se ha querido representar la Trinidad, pero no alcanzan a representar al Dios verdadero.
La simbólica formal: la necesidad de hablar simbólicamente de Dios, ha llevado a que se utilicen figuras formales convencionales como el triangulo para representar la igualdad que puede haber entre las tres personas de la Trinidad.
Como conclusión bien podemos decir que todos los símbolos nos pueden acercar a una idea de lo que es la Trinidad, pero ninguna alcanza a expresar todo lo que contiene la experiencia de sentir y manifestar en la vida cotidiana, el amor del Padre, que se manifiesta en el Hijo, por medio del Espíritu Santo.
Redactó Lucas
No hay comentarios:
Publicar un comentario